DESEOS DE PLATA

A cierta edad,

un poco por amor propio,

otro poco, por picardía,

las cosas que más deseamos...

... son las que fingimos no desear.

No pretendas que las cosas ocurran como tú quieres.

Desea, más bien,

que se produzcan tal como se producen y...

...serás feliz.

Los deseos se tienen,

no se piden.

Lo que se pide es el objeto del deseo.

Estas frases las dijeron hombres sabios, escritores, filósofos...

Estas pulseras de plata las lucen personas buenas

 a las que yo les deseo lo mejor.

(Bueno..., un par de ellas son mías y... 

¡qué narices!, también me deseo lo mejor. 

Además, en ellas llevo un par de colgantes que suponen recuerdos, 

por tanto, conmigo.)

Qué sí, qué sí, que tengo pendiente el Carnaval y...

necesito un poquito más de tiempo,

un fotógrafo a quien engañar

y que la suerte se ponga de mi parte para que todo me salga a la primera.

Recopilo imágenes y objetos,

ordeno unas pocas de ideas que me flotan por la mente y...

¡¡vuelvo pronto!!

Hasta tanto, yo a ti te deseo que tengas...

¡¡una muy buena semana!!

La mía llega cargada de remates finales,

puestas a punto y...

muchísimas ganas e ilusión, así que...

será una buena semana, sí o sí.

¡¡¡A por el lunes!!!